España lidera la clasificación de The Economist como mejor economía de la OCDE en 2024

Ha superado a Estados Unidos tanto en crecimiento económico como en el ritmo de creación de empleo.

España ha sido el país con mejor desempeño económico en 2024, según el análisis realizado por el diario The Economist entre 37 economías del mundo, la mayoría de ellas de países ricos. Cinco han sido los indicadores económicos y financieros que se han valorado para realizar este ranking: PIB, desempeño bursátil, inflación subyacente, desempleo y déficit público.

En general, la economía mundial se ha mostrado sólida este año, a pesar de factores como los altos tipos de interés, las guerras en Europa y Oriente Medio y las elecciones en países como Estados Unidos e India. El PIB mundial cerrará 2024 con un aumento del 3,2%, según el FMI. Mientras, la inflación se ha moderado, el crecimiento del empleo es sólido y las bolsas han subido más de un 20% por segundo año consecutivo.

El tirón del mercado laboral
Las mejores economías del año se encuentran en Europa. Tras España, se sitúan Grecia, Italia, Irlanda y Dinamarca. Por el contrario, dos economías habitualmente destacadas como son el Reino Unido y Alemania dejan decepcionantes resultados, y Letonia y Estonia cierran el listado como ya hicieron en 2022.

El PIB español superará el 3%, gracias al tirón del mercado laboral y a los altos niveles de inmigración, que elevan la producción. Aunque ligeramente por debajo de la media mundial, este indicador, el más fiable para medir la salud general de una economía, contribuye a colocar a nuestro país al frente del ranking. En lo que se refiere al desempleo, las cifras han caído a su nivel más bajo en más de una década.

La envidia del mundo rico
El análisis elaborado por The Economist subraya el crecimiento de España, especialmente al comparar los datos con los de 2012, en el peor momento de la crisis económica. Hasta tal punto, que ha superado a Estados Unidos, al que describe como “la envidia del mundo rico”, tanto en crecimiento económico como por el ritmo de creación de empleo.

Para el diario británico, España es en 2024 el país que ofrece la mejor réplica “a quienes dicen que Europa está condenada al estancamiento”. Y entre las lecciones que, indica, deberían asumir el resto de países, destaca la decisión de “centrarse en los servicios y no fetichizar la industria”. En este sentido, además de la recuperación del turismo tras la pandemia, España está ascendiendo en la cadena de valor, al exportar cada vez más servicios de consultoría y conocimientos tecnológicos. Concretamente, los servicios no turísticos han pasado de suponer alrededor del 5,5% del PIB antes de la pandemia a entre el 7% y el 8% actual, según BBVA.

Fuerza laboral extranjera
La segunda lección que extrae The Economist es la apertura del mercado laboral a la inmigración. Desde 2019, afirma, la fuerza laboral extranjera ha aumentado en alrededor de 1,2 millones de personas, en su mayoría provenientes de Latinoamérica. Y otra apertura, esta vez al capital extranjero, ha contribuido igualmente al crecimiento económico. Esta publicación destaca dos inversiones en las que participa el capital chino: la fábrica de baterías que Stellantis y CATL han anunciado en Zaragoza y la primera planta europea de Chery International, que se instalará en Barcelona.

Las reformas estructurales que se han abordado en España en los últimos años han servido para obtener los frutos que describe The Economist. Desde la reforma de los bancos a la del mercado laboral, que ha aumentado los contratos indefinidos, pasando por el impulso de las energías renovables, con medidas como la abolición del impuesto al sol. En el futuro, recomienda continuar con las reformas para, por ejemplo, afrontar el desafío de los precios de la vivienda, encarecida por factores como el turismo y la inmigración.

Foto: Carl Godfrey / The Economist