En un contexto geopolítico complejo, España y China han dado un nuevo impulso a su relación bilateral, según ha explicado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez durante su visita oficial al país.

En su reunión con el presidente Xi Jinping, ambos líderes acordaron mantener un diálogo regular al más alto nivel. Esta relación se ha construido sobre unas sólidas bases demostrada en las dos visitas que el presidente del Gobierno ha realizado a China en menos de dos años.

Pedro Sánchez, en su última jornada en el país, ha visitado el clúster empresarial tecnológico español de Kunshan, un parque industrial en el que tienen sus plantas de producción muchas empresas nacionales y ha realizado un balance positivo del viaje.

Sánchez ha señalado que, a pesar de las diferencias que puedan existir en ciertos ámbitos, "los puntos en común son más importantes" y ha hecho un llamamiento a la cooperación. Especialmente, entre Europa y China, dos regiones que "desempeñan un papel central en el mundo".

A este respecto, el presidente del Gobierno ha reiterado el compromiso de España para "tender puentes y construir una relación sólida y cooperativa", como así le trasladó al presidente Xi Jinping y al resto de interlocutores del país durante sus respectivas reuniones, y ha remarcado la apuesta de España por una apertura comercial entre ambas regiones y por la resolución negociada y acordada, dentro del marco de la OMC, de los conflictos comerciales siempre que se tengan en cuenta las preocupaciones legítimas de ambas partes y que las relaciones comerciales se desarrollen en igualdad de condiciones. "No queremos una guerra comercial que no beneficiaría a nadie" ha afirmado el presidente.

Uno de los objetivos de esta visita ha sido el de reforzar la relación económica y comercial entre los dos países. Por ello, el presidente del Gobierno ha mantenido encuentros con empresas españolas y chinas en el marco del Consejo Asesor Empresarial celebrado en Pekín, y en el Encuentro Empresarial en Shanghái, junto a otras reuniones bilaterales con compañías chinas con intereses o planes de inversión en España. Entre ellas, se encuentran las empresas: SAIC, Chery, Hunan Yuneng New Energy Batteries Material y Envision.

El presidente ha asegurado que durante estos encuentros ha constatado "el enorme potencial de crecimiento que tiene la relación entre España y China", especialmente, en industrias verdes e innovadoras. No obstante, también ha señalado la necesidad de reequilibrar las relaciones económicas entre ambos países.

El viaje ha finalizado con la visita del presidente del Gobierno al clúster empresarial tecnológico español de Kunshan, en la provincia de Suzhou. Esta ciudad alberga un parque industrial en el que tienen sus plantas de producción muchas empresas nacionales instaladas en China.

Sánchez se ha reunido con los CEOs y representantes de varias de estas empresas, entre las que se encuentra Mondragón Internacional, Fagor Arrasate y Gestamp. El presidente ha comprobado de primera mano el trabajo que realizan en China, mostrando el apoyo del Gobierno a dichas empresas presentes en un mercado tan importante y complejo como el chino.