Seat continuó en 2023 con su actual estrategia de inversión, que le ha llevado a desembolsar un total de 5.309 millones de euros en los últimos cinco años. La principal protagonista en el último ejercicio fue la partida de I+D, que aumentó un 44% respecto al ejercicio anterior y alcanzó los 939 millones de euros. Un dato que refleja el interés de la compañía por innovar en el mercado con nuevos modelos de sus marcas Seat y Cupra.

Como resultado de estas inversiones, la marca Seat prevé seguir mejorando el rendimiento y la eficiencia de sus coches híbridos enchufables y de bajo consumo hasta que se dejen de comercializar los motores de combustión. En los próximos meses lanzará una versión actualizada y mejorada del León, en 2025 renovará el Arona y el Ibiza, y después le llegará el turno al Ateca.

El CEO de Seat y Cupra, Wayne Griffiths, explica que la intención de la compañía es “devolver a la marca Seat al lugar que le corresponde, manteniendo el crecimiento de dos dígitos del año pasado con nuevas inversiones en la marca y sus modelos. Además, estamos estudiando lo que podemos ofrecer en el mundo eléctrico bajo la marca Seat. En relación con Seat, prometo que lo mejor está aún por llegar”.

Grandes retos
La marca Cupra, por su parte, afronta en 2024 su mayor ofensiva en el mercado, con el lanzamiento de su segundo modelo 100% eléctrico y de un SUV electrificado, a los que se unirán las nuevas versiones del León y el Formentor. También abrirá nuevos concesionarios en Estambul (Turquía), Viena (Austria) y Manchester (Inglaterra, Reino Unido), aunque, sin duda, su mayor reto será su llegada a Estados Unidos en los próximos años.

Como indica Griffiths, “Cupra entrará en Estados Unidos a finales de esta década. Nuestro plan es lanzar la versión eléctrica del Formentor y un crossover SUV eléctrico más grande. Este crossover SUV se producirá en las fábricas del Grupo Volkswagen en Norteamérica, incluido México. En un primer momento, Cupra se lanzará en una selección de estados de las costas este y oeste y en estados del cinturón del sol. Todo ello, a través de un nuevo modelo de distribución”.

Electrificación de Martorell
Otro de los retos que afronta la compañía en la actualidad es contribuir a que España se convierta en un hub de la movilidad eléctrica en Europa. Su aportación incluye la construcción de una planta de ensamblaje de baterías en la fábrica de Martorell (Barcelona) y la transformación de la línea 1 para dedicarla a la producción de dos modelos eléctricos, uno de Cupra y otro de Volkswagen.

La inversión destinada a la electrificación de Martorell es de tres mil millones de euros, de los que trescientos millones van destinados a la planta de baterías. En esas nuevas instalaciones, que generarán más de quinientos empleos y ocuparán 64.000 metros cuadrados, se ensamblarán celdas de baterías procedentes de la gigafactoría que el grupo Volkswagen impulsa en Sagunto (Valencia).

Paneles solares
La nueva planta producirá cada día 1.400 sistemas de baterías que llegarán directamente a las líneas de montaje a través de un sistema de transporte de seiscientos metros de longitud. El 70% de la electricidad necesaria para este proceso se producirá en los 11.000 paneles solares que funcionarán en las propias instalaciones de Seat en Martorell.

Mientras tanto, la planta del grupo Volkswagen en Navarra recibió en 2023 una inversión de 75,2 millones de euros, de los que 52,1 millones están relacionados con dos modelos eléctricos que se lanzarán en 2026. Una inversión que tiene continuidad, pues la nueva prensa, en la que de momento se han desembolsado diez millones de euros, costará un total de 52,5 millones.

^{Foto: Seat}