La reciente compra de la española Enerfín, por 1.500 millones de euros, ha sido la mayor operación de Statkraft en su historia.

Statkraft nació hace 130 años en Noruega y se dedicaba a la generación de energía hidroeléctrica en los saltos de agua. Propiedad 100% del estado noruego, en los últimos años, la empresa se ha expandido internacionalmente –está presente en más de veinte países– y genera electricidad a través de diversas fuentes de energía –hidroeléctrica, solar y eólica, principalmente–. En 2018, comenzó su actividad en España, donde tiene el objetivo de convertirse en uno de los principales productores de energía renovable en el año 2030.

 

Actualmente, Statkraft cuenta con cerca de 1,4 gigavatios de potencia instalada y en operación, en tecnologías solar y eólica. Su cartera de proyectos en desarrollo alcanza los 1,6 gigavatios e incluye proyectos fotovoltaicos, eólicos e hibridaciones, así como almacenamiento energético.

 

Además, es un referente en los contratos de compraventa de energía a largo plazo (PPA) tanto en España como en Europa. Ofrece soluciones personalizadas a sus clientes, que son industrias y grandes consumidores. Statkraft ha cerrado el ejercicio 2024 con un total de 85 contratos en España, que supone un volumen de energía comprometido entre compra y venta de más de cincuenta teravatios hora. En este segmento de negocio tiene una cartera de 2,1 gigavatios de potencia instalada solar y eólica.

 

 

¿Con qué objetivo se creó la filial española y qué evolución ha tenido?

La compañía comenzó su actividad en España en 2018, con un equipo muy reducido que, principalmente, se dedicaba a las actividades de mercado relacionadas con los contratos de compraventa de energía. Posteriormente, en el año 2020, Statkraft adquirió la británica Solar Century, con lo que incrementaba su presencia con un portafolio eminentemente solar. Tras unos ejercicios con un crecimiento orgánico, en 2024, hemos culminado la operación de adquisición de la española Enerfín, con la que consolidamos nuestra apuesta por el mercado español. Nos hemos situado en el top diez eólico y contamos con un objetivo ambicioso de seguir incrementando nuestra presencia.

 

La compra de Enerfín les dio músculo en el mercado español. ¿Qué cifras han manejado en esta operación?

En efecto, la operación de adquisición de Enerfín, que alcanzó los 1.500 millones de euros, ha sido una de las más importantes llevadas a cabo en los últimos años en el sector energético español. Para nosotros ha supuesto todo un hito en nuestra historia y nos ha convertido en un actor relevante en el mercado. Ahora tenemos una cartera balanceada de proyectos eólicos y solares, que suman 1,4 gigavatios de potencia instalada, entre activos propios y operados para terceros, y con posibilidades de hibridación y repotenciación por otros trescientos megavatios. Gracias a esta operación, no sólo hemos incorporado instalaciones renovables en operación y en desarrollo, sino que hemos integrado a un equipo de profesionales con los que ya sumamos cerca de trescientos empleados en España.

 

¿Prevén crecer con más compras en España, o solo de forma orgánica?

De momento no tenemos previsto realizar ninguna compra más de estas características. Cabe destacar que la operación de Enerfín ha sido la mayor que ha llevado a cabo el grupo Statkraft en su historia. No obstante, siempre estamos atentos a explorar y valorar las oportunidades que puedan surgir en el mercado.

 

¿Qué importancia tiene España en la estrategia de la compañía?

España es uno de los mercados prioritarios donde el grupo Statkraft ha decidido seguir invirtiendo tras la revisión de su estrategia, llevada a cabo en 2024. Entre las razones para invertir en este mercado figuran: el privilegiado recurso natural en sol y viento y, cómo no mencionarlo, la existencia de un sector profesional y de calidad que está presente en toda la cadena de valor de la industria, lo que permite encontrar aliados con quienes desarrollar proyectos, así como una regulación que apoya la transición energética. Aunque todavía hay desafíos en el proceso de permisos, en el acceso a mecanismos de apoyo para tecnologías menos maduras y en el avance de la transposición de directivas europeas (como RED III, directiva de energías renovables de la UE 2023/2413), creemos que el actual Gobierno español tiene objetivos claros y apoya el cambio de modelo necesario.

 

Acaban de inaugurar unas nuevas oficinas en Madrid. ¿Es otro paso para seguir creciendo?

La inauguración de nuestras nuevas oficinas en Madrid, que se suman a las que ya tenemos en Valencia, es una consecuencia directa de la integración de Enerfín en Statkraft. Nuestro equipo se ha incrementado en alrededor de noventa personas, casi todas ellas en Madrid, por lo que era necesario dotarnos de mayor espacio de trabajo. Ahora tenemos un centro de trabajo en la capital que se ajusta al tipo de organización en la que nos hemos convertido.

 

Empiezan ahora a apostar por la hibridación y por el almacenamiento en baterías. ¿A qué responde esta maniobra?

El almacenamiento energético es el siguiente desafío para el sector. Tenemos que ser capaces de garantizar que toda la energía renovable que está en desarrollo pueda integrarse con seguridad en el sistema eléctrico y ajustar su oferta a la demanda. Para ello, es fundamental contar con la instalación de baterías. Nosotros contemplamos hibridar los activos eólicos y fotovoltaicos con baterías. En este momento, tenemos seis proyectos de hibridación en fase de tramitación, con un total de 72,6 megavatios pico, en proyectos de Navarra, Galicia, Andalucía y Extremadura.

 

¿Cómo han evolucionado los criterios de sostenibilidad en el desarrollo de proyectos renovables?

Los criterios de sostenibilidad cada vez son más relevantes en el diseño de los proyectos renovables. La tramitación en nuestro país es garantista, con lo que exige exhaustivos seguimientos y estudios que garanticen que la instalación puede desarrollarse minimizando la afección en el territorio y en el entorno. Para nosotros, es una excelente noticia, ya que nuestro compromiso responde a un triple prisma de sostenibilidad: económica, social y ambiental. Sabemos que la transición energética sólo será exitosa si contamos con todos y si los beneficios se reparten entre todos. En este sentido, cabe destacar que ocho de las diez plantas solares que operamos en Andalucía cuentan con los sellos de excelencia en sostenibilidad que otorga Unef y que garantizan que las instalaciones se han desarrollado respondiendo a estrictos criterios de sostenibilidad. Además, a finales de 2024, recibimos el premio Transit de la Unión Europea en las cuatro plantas que operamos en Cádiz y que destaca las medidas sociales desplegadas durante su desarrollo. Consistieron en planes de formación y empleo, creación de un programa de becas para jóvenes estudiantes y promoción de la economía circular.

 

Fotos: Statkraft