España fue el quinto receptor mundial de inversión inmobiliaria en 2018

Nuestro país superó los 15.000 millones de euros de capital extranjero en un ranking liderado por Estados Unidos

La inversión inmobiliaria a escala mundial alcanzó en 2018 los mayores volúmenes conocidos hasta la fecha, según el Global Investment Atlas 2019, un informe elaborado por la consultora inmobiliaria Cushman & Wakefield. En total, se movieron en todo el mundo 1,75 billones de dólares (1,57 billones de euros). Con un aumento del 4% respecto al año anterior, las expectativas de cara a 2019 y 2020 indican que al menos se mantendrá esta cifra.

España continúa su tendencia como un atractivo mercado de inversión inmobiliaria y se espera que el apetito inversor se mantenga sólido en 2019 y 2020. Dentro del ranking de países que recibieron mayor inversión inmobiliaria extranjera durante 2018, nuestro país, con más de 15.000 millones de euros, ocupa el quinto puesto por detrás de Estados Unidos, Reino Unido, Alemania y Francia.

Ranking por regiones
Por regiones, América del Norte fue la que registró un mayor aumento en las inversiones inmobiliarias el pasado año, hasta alcanzar los 489.140 millones de euros, un 17% más que en 2017, mientras que la que recibió más inversiones fue Asia-Pacífico, con 775.810 millones de euros. La región EMEA (Europa, Oriente Próximo y África) se quedó en tercer lugar con 296.530 millones de euros, un 10,8% menos que el año anterior.

De cara al próximo ejercicio, sin embargo, la tendencia marca un cambio de ritmo y anticipa una reducción de la inversión en América del Norte y un aumento en Asia-Pacífico y EMEA.

Si nos centramos en la inversión transfronteriza, los datos cambian claramente. Esta alcanzó en 2018 los 362.820 millones de euros, con un crecimiento del 10,7% respecto a 2017. En este segmento, la región EMEA atrajo el 53% de la inversión global.

El precio de los activos inmobiliarios aumentará este año, impulsado por la estabilidad del sector y por el crecimiento de los precios de los alquileres. Los inversores, de esta forma, buscarán refugio en un sector que puede ayudarles a compensar la bajada de los tipos de interés que afecta a otros productos financieros. Otro factor que favorece la inversión inmobiliaria es la diversificación de los mercados, propiciada por la globalización.

Madrid, tercera del mercado mundial de lujo
La agencia francesa Barnes, especializada en el segmento inmobiliario de lujo, ha colocado a Madrid en la décima posición del ranking mundial de su informe Global Property Handbook. Sin embargo, y gracias a las buenas expectativas, prevé que este año alcance la tercera posición, por detrás de Oporto y Lisboa.

Por un lado, la posición de Madrid se ve reforzada por factores como la calidad de vida, la accesibilidad y la oferta educativa. Por otro lado, pesa el interés de los inversores extranjeros, con gran peso de los venezolanos, en la compra y rehabilitación de viviendas para volverlas a poner en el mercado, así como el traslado de inversiones desde Cataluña debido a la situación política.

En 2018, la demanda de viviendas de lujo en España se concentró en propiedades entre 150 y 500 metros cuadrados (sin incluir la parcela), con precios entre 500.000 y tres millones de euros. El precio del metro cuadrado subió un 3%, hasta los 6.800 euros. La política de Golden Visa ha facilitado la llegada de extranjeros que invierten en activos inmobiliarios de lujo.