La cadena de supermercados Lidl cumple diez años en Canarias y lo hace creciendo. Tras las tres aperturas del último año, ha alcanzado las treinta tiendas y ya da empleo directo a más de mil personas en el archipiélago. Ahora, para mejorar su logística y prepararse de cara a nuevas aperturas, ha puesto en marcha un almacén de 25.000 metros cuadrados que se suma al que ya tenía en Güímar (Tenerife).

La nueva plataforma logística está situada en la otra gran isla, en Gran Canaria, en la localidad de Agüimes, y entró en funcionamiento el pasado mes de julio. Su construcción ha supuesto una inversión de alrededor de 45 millones de euros, y en sus instalaciones trabajan ya 60 nuevos empleados de la compañía.

Organización por provincias
Con la puesta en marcha del nuevo almacén, el de Güímar pasará de suministrar mercancía a las tiendas de todo el archipiélago a centrarse en las de la provincia de Santa Cruz de Tenerife. Por su parte, el de Agüimes ya está prestando servicio a los 14 establecimientos que la cadena tiene en la provincia de Las Palmas, distribuidos en las islas de Lanzarote, Fuerteventura y Gran Canaria.

El nuevo almacén ocupa más de 25.000 metros cuadrados en una parcela de unos 40.000 metros cuadrados. Tiene capacidad para almacenar alrededor de 21.000 palés y se han instalado 49 muelles de carga y descarga para organizar la entrega de mercancías por parte de los proveedores y su posterior distribución a los diferentes establecimientos.

Las instalaciones están equipadas con diferentes soluciones que optimizan el consumo de energía, como los paneles fotovoltaicos para autoconsumo. Además, han obtenido el certificado BREEAM de construcción sostenible, reconocido a escala global.

Inversión y empleo en Canarias
Entre los productos que se venden en los lineales de los supermercados Lidl se encuentran los que le suministran más de 100 proveedores canarios. Concretamente, invierte unos 50 millones de euros al año en la adquisición de productos canarios, algunos de los cuales exporta a sus supermercados ubicados en otros países.

Recientemente, la cadena ha incrementado un 40% las referencias de origen canario en sus lineales, con productos como leche, carne, pescado, fruta y verdura, vino, bollería y bebidas. Estas inversiones tienen un reflejo en el empleo, que, entre puestos directos, indirectos e inducidos, se sitúa en torno a los 3.000 en las islas. Su actividad aporta a la región el 0,4% de su PIB, unos 140 millones de euros al año.