Capza, Unigrains y Cantomi entran como accionistas en la cárnica La Finca

La compañía española se caracteriza por sus inversiones en I+D+i y por el cuidado del bienestar animal

El fondo francés Capza se ha integrado como accionista en la compañía española La Finca, tras sentirse atraído por su fuerte posición competitiva y por su situación como única marca premium en el sector cárnico español. Otros factores decisivos han sido su fuerte potencial de crecimiento, su capacidad de innovación y su sólido equipo directivo.

De hecho, la familia Jiménez Barbero, fundadora de la empresa hace veinte años, seguirá al frente del negocio. Junto a ellos, se incorporarán José María Vara como presidente, Juan Lizariturry como consejero y Jaime Girón de Velasco como director financiero. Su objetivo será fortalecer la compañía con su experiencia en la industria alimentaria, comercio minorista y capital privado.

Junto a Capza, se han unido, en este caso con participaciones minoritarias, otros dos inversores internacionales, el francés Unigrains y el argentino Cantomi. Ambos tienen una amplia experiencia en la industria alimentaria. Concretamente, Unigrains fue creada en 1963 por agricultores de cereales, y en la actualidad tiene inversiones directas e indirectas en cien empresas de 25 países.

Estrategia de diversificación
Gracias a la entrada de sus nuevos socios, La Finca podrá acometer un ambicioso plan de crecimiento orgánico y externo y una estrategia de diversificación. También tratará de convertirse en el primer operador neutro en carbono de su sector en España certificado por Naciones Unidas. Con ese reconocimiento, quiere liderar la transformación sostenible de la industria alimentaria. En la actualidad, la compañía ya es reconocida por la producción responsable de carne vacuna sana y de primera calidad.

Precisamente, la imagen de marca de La Finca se basa en la calidad, la salud y el bienestar animal, atributos que trabaja mediante una gestión integral de toda la cadena de valor, asegurando la completa trazabilidad del producto. Heredera de la carnicería tradicional que crearon los hermanos Jiménez Barbero en 1998 para continuar el negocio familiar, en la actualidad comercializa sus productos a través de una estrategia de canales diversificada, con una presencia relevante en retail y foodservice (canal profesional).

Certificado de bienestar animal
Hasta la fecha, la cárnica española ha recibido certificaciones de primer nivel como el sello de calidad IFS y el certificado de bienestar animal de Aenor. Entre sus productos más vendidos destacan sus cortes premium y hamburguesas gourmet, además de otros platos preparados como el carpaccio y el steak tartar. Sobre esta última receta, además, es el único productor que la comercializa en el canal retail.

El crecimiento de La Finca ha sido constante desde los inicios, y parte de ese éxito lo debe a las inversiones que ha realizado en I+D+i para desarrollar nuevos productos de alto valor añadido. Pionera en esta actividad en el sector cárnico español, cuenta con unas instalaciones de procesado de carne de última generación en la Comunidad de Madrid, donde se encuentra la mayoría de sus 170 empleados.

Calidad, innovación y sostenibilidad
Los hermanos Jiménez Barbero valoran la entrada de los nuevos socios y directivos, que “nos permitirán mantener nuestra posición como pioneros en la industria cárnica española en términos de calidad, innovación y sostenibilidad. Con su apoyo, seremos también la primera empresa neutra en carbono de la industria”.

Para el socio y director de Capza España, José Tomás Moliner, “La Finca es el resultado de la pasión y el esfuerzo de tres hermanos que han creado la única empresa cárnica con marca premium reconocida en España, con una sólida reputación y clientes de primera clase. Los hermanos Jiménez Barbero tienen una fuerte convicción en los pilares fundamentales de La Finca: salud, calidad, innovación y ESG (gobierno ambiental, social y corporativo), una visión que compartimos plenamente”.

Foto: La Finca