Veolia pone en marcha en Barcelona la primera red urbana de frío sostenible

La energía residual se recupera del proceso de regasificación de una terminal de gas natural licuado de Enagás.
La compañía francesa Veolia, especializada en transformación ecológica, y Enagás han puesto en marcha en Barcelona la primera red urbana de recuperación de frío sostenible del mundo. La energía se obtiene, concretamente, al recuperar el frío residual del proceso de regasificación de la terminal de gas natural licuado (GNL) que el operador energético tiene en el puerto de Barcelona, el décimo más grande de Europa.
Enagás, que es a su vez el gestor técnico del sistema gasista y de hidrógeno en España, ha firmado un acuerdo con Veolia para desarrollar oportunidades de negocio y adaptar esta solución innovadora y sostenible tanto en España como a nivel internacional. De esta forma, se podría exportar este ejemplo de colaboración público-privada a las más de 150 terminales de regasificación que hay en todo el mundo.
Energía sostenible, descarbonizada y competitiva
La nueva red de frío urbana de Barcelona ya está operativa y genera 131 gigavatios hora al año de energía sostenible, descarbonizada y competitiva. El GNL llega a la terminal en barco, donde se mantiene en estado líquido con una temperatura de 160 grados bajo cero. Para regasificarlo, hay que devolverlo a la temperatura ambiente, proceso en el que se utiliza agua del mar.
Mediante el proceso desarrollado por Veolia, el frío residual ahora se recupera y se aprovecha a una temperatura de veinte grados bajo cero. La energía recuperada se inyecta en la que Veolia describe como la mayor red de refrigeración urbana del sur de Europa, repartida entre el sur de Barcelona y parte de Hospitalet de Llobregat.
Infraestructuras como la Fira de Barcelona, oficinas de la Generalitat de Catalunya y centros industriales se aprovechan de esta fuente de energía junto a equipamientos públicos, clientes residenciales y otros edificios de uso terciario, desde oficinas a hoteles y centros comerciales. Veolia ha firmado también un acuerdo de intenciones con Mercabarna para estudiar la posibilidad de suministrar frío sostenible a las más de seiscientas empresas que utilizan sus instalaciones.
Un enorme potencial
La consejera delegada de Veolia, Estelle Brachlianoff, explica: “En la lucha contra el calentamiento global y la búsqueda de la soberanía energética, debemos hacer todo lo que esté en nuestra mano para evitar las pérdidas de energía. Como parte de nuestro programa estratégico GreenUp, la recuperación de calor y frío residual es un componente importante de la estrategia de Veolia para la transformación ecológica de su mix energético. La replicabilidad de esta solución es una primicia mundial que abre un enorme potencial en Europa y a escala internacional”.
Por su parte, el consejero delegado de Enagás, Arturo Gonzalo, responde: “Hoy hemos dado un paso muy relevante en el compromiso con la innovación y sostenibilidad en nuestros procesos industriales. Estamos ante un proyecto de energía sostenible emblemático para la ciudad de Barcelona, con tecnología de generación desarrollada por Enagás, que permitirá un acceso a un frío sostenible y competitivo para las industrias y los consumidores del área de influencia de la planta de regasificación de Enagás y del puerto de Barcelona”.
Foto: Veolia