El sector del golf genera 12.769 millones de euros y 121.393 puestos de trabajo directos e indirectos al año en España, y atrae a 1,2 millones de turistas extranjeros. Son los principales datos que aparecen en el estudio “El golf como catalizador de la actividad económica en España”, elaborado por IE University con la colaboración de la Asociación Española de Campos de Golf (AECG) y la Real Federación Española de Golf (RFEG).

Se trata del primer estudio independiente que analiza la relevancia y la rentabilidad del golf en nuestro país. Los autores subrayan el papel que puede tener este deporte en la fase de recuperación económica que deberá abordar España tras la pandemia. Y es que nuestro país, indica el informe, se consolida como líder mundial en la recepción de turismo internacional de golf.

Repercusión en otros sectores
El impacto directo que genera esta industria turística está valorado en 5.418 millones de euros, que alcanza los 12.769 millones si se incluye el impacto indirecto. Concretamente, de los beneficios que produce esta actividad, nada menos que el 88% (7 de cada 8 euros) repercuten en otros sectores, como hoteles, restaurantes, comercios y transporte. Entre estas actividades ajenas al golf, se reparten 4.640 millones de euros.

En 2018 llegaron a España 1.195.000 turistas que practicaron el golf durante su visita. Entre ellos, el 98,6% venían de otros países europeos. Se trata de un turismo de calidad, según el informe, dado que la estancia media fue de 11,9 días frente a los 7,4 días que pernocta el turista medio en nuestro país. Además, el gasto medio de los jugadores de golf durante su viaje fue de 3.850 euros en total, con una media de 324 euros diarios.

Desestacionalización del turismo
El golf también contribuye a otras necesidades del turismo español, como la desestacionalización, y es que su práctica se extiende a todos los meses del año. De esta forma, se diferencia del turismo tradicional de sol y playa, concentrado fundamentalmente en julio y agosto.

Por otro lado, el empleo que genera el golf es considerado de calidad, con un 95% de empleos directos indefinidos y un 94% a jornada completa. La media del empleo en España indica un 73,2% de contratos indefinidos y un 85% a jornada completa.

Otro factor que coloca al golf como catalizador de la actividad económica es la inversión en segundas residencias. El informe cifra en un 23,7% los turistas que juegan al golf en España y tienen una segunda residencia en nuestro país para alojarse durante su estancia. En total, tienen 283.000 viviendas en propiedad, valoradas en 41.937 millones de euros. De hecho, la mayoría de esos propietarios vienen al menos una vez al año, y el 21,49% vienen al menos una vez al trimestre.

Destino seguro y sostenible
Claudia Hernández, presidenta de la AECG, afirma: “Tenemos la oportunidad de poner en valor nuestras fortalezas y contribuir a la recuperación económica de nuestro país. El golf es una actividad saludable, capaz de transmitir la imagen perfecta para proyectar un destino seguro y sostenible”.

Por su parte, Gonzaga Escauriaza, presidente de la RFEG, señala: “Desde hace mucho tiempo he sido testigo de cómo el turismo de golf ha cambiado muchas localidades de nuestro país. Se cerraban hoteles durante el invierno que ahora permanecen abiertos, se han construido nuevos campos de golf donde no había nada, nuevas ofertas de ocio y restauración, nuevas infraestructuras de transporte, etcétera. Sin duda, el turismo de golf ha contribuido a generar nuevas ofertas turísticas y una desestacionalización que nos ha impulsado a ser líderes mundiales”.