La eléctrica italiana Enel, propietaria de un 70% de Endesa, ha revisado al alza su plan de inversiones previsto hasta 2025, con un incremento del 15% sobra la cifra prevista hasta alcanzar los 8.640 millones de euros. El 90% de esa cifra está directamente relacionada con los objetivos de desarrollo sostenible de la ONU. El crecimiento en su cartera de generación de energía renovable será el principal objetivo de la inversión de la eléctrica, con un 39% más respecto al plan anterior. La compañía destinará 4.300 millones de euros a llegar a los 13.900 megavatios de capacidad en el trienio 2023-2025.

Concretamente, para este periodo la compañía del grupo Enel ahora prevé sumar 4.400 megavatios a la descarbonización de su mix energético, un 10% más que en sus expectativas anteriores. El 68% (3.000 megavatios) será de generación solar y el resto, eólico. De esta forma, estima que, a finales de 2025, el 91% de su cartera de generación en la Península será libre de emisiones, frente al 72% con el que va a cerrar 2022.

Digitalización de la red
El segundo mayor destinatario del plan de inversiones se lo llevará el proyecto de digitalización de la red de distribución, fundamental para facilitar la transición energética. En total, la compañía desembolsará 2.600 millones de euros en este capítulo, que en este caso se han reducido respecto al plan inicial para adaptarse a lo que describe como un “contexto de incertidumbre regulatoria”. El objetivo de esta inversión es mejorar la calidad del servicio y reducir las pérdidas.

El tercer eje, con 900 millones de euros, se enfocará en la oferta de energía limpia a precios asequibles, junto a otros servicios energéticos de valor que contribuyan a descarbonizar la economía. La eléctrica aspira a alcanzar los 7,3 millones de clientes en el mercado libre, que suponen un incremento del 6% respecto a la cifra actual. También quiere que el 95% de la energía que vende a precio fijo provenga de fuentes renovables al final de este periodo. Finalmente, quiere llegar a los 66.000 puntos de recarga públicos y privados, con los que multiplicaría por cinco los que tiene a cierre de 2022.

Un sistema energético confiable
El consejero delegado de Endesa, José Bogas, explica: “En el actual contexto de mercado, la aceleración de la electrificación de los consumos energéticos a partir de fuentes limpias se revela como la vía para lograr un sistema energético confiable en toda Europa, que reduzca la volatilidad de los precios y contribuya a la recuperación económica. Los gobiernos están buscando vías para asegurar precios asequibles, seguridad de suministro y sostenibilidad ambiental. Desde Endesa, queremos apoyarnos en las fortalezas de nuestro modelo de empresa verticalmente integrada para cubrir una proporción cada vez mayor de los contratos a precio fijo con nuestros clientes con nuestra creciente producción libre de emisiones. Ello nos permitirá reducir nuestro perfil de riesgo y garantizar precios competitivos a familias, empresas y administraciones”.

Por su parte, el director general económico-financiero, Luca Passa, afirma: “Vamos a seguir focalizando la estrategia financiera en instrumentos ligados a criterios de sostenibilidad para sustentar el crecimiento. En un año complejo como 2022, hemos levantado 13.600 millones en deuda sostenible y nuestro objetivo es refinanciar progresivamente los vencimientos futuros y obtener nuevos fondos a través de instrumentos ligados a criterios de sostenibilidad. Con todo ello, el volumen de financiación sostenible, que ahora representa más del 65% del total, se situará al final del plan por encima del 85%”.

^{Foto: Endesa}