El grupo Bell prepara la puesta en marcha de su tercera planta en España

Supone una inversión de 40 millones de euros y la creación de cien nuevos empleos

La construcción de la nueva planta de producción de jamón serrano del grupo Bell en Fuensalida (Toledo) sigue avanzando, con una inversión estimada en 40 millones de euros y una creación de empleo estimada en unos cien nuevos puestos de trabajo, aparte de los indirectos y de los creados durante la obra. Cuando estén a pleno rendimiento, en estas instalaciones se podrán secar hasta un millón de piezas al año. El objetivo de la multinacional suiza es ponerlas en marcha este mismo año.

En abril de 2017, el grupo Bell Food compró las instalaciones de producción de Nobleza Ibérica en Azuaga (Badajoz). Allí tiene una capacidad de producción anual de 150.000 jamones y mil toneladas de embutidos. También cuenta con una plataforma logística y un secadero de jamón blanco en Casarrubios del Monte (Toledo). La nueva planta, además del secado, se destinará al deshuese y loncheado de jamón blanco.

Las nuevas instalaciones
La inversión en las nuevas instalaciones, que alcanzará los 40 millones de euros, incluye la compra del terreno: una parcela de 65.944 metros cuadrados que fue, según la multinacional, una de las mayores adquisiciones de suelo destinadas a producción industrial en todo el territorio nacional en 2016.

La nueva planta ocupará 26.032 metros cuadrados, y su construcción supone una inversión de alrededor de 12 millones de euros. Contará con dos zonas diferenciadas: una para el secado y otra para el procesamiento posterior.

El grupo Bell Food comercializa sus productos en España con la marca Sánchez Alcaraz, que adquirió en 2008. Gran parte de su producción en nuestro país se destina a la exportación con otras marcas del grupo.